¿Duermes bien?
Nadie se extraña hoy en día cuando comentamos que hemos dormido mal. El ritmo de vida, el estrés, algunos fármacos, el consumo de estimulantes, etc. Muchísimos factores pueden influir en uno de los momentos más importantes del día: el sueño. Si apreciamos dificultades para conciliarlo y/o mantenerlo a lo largo de toda la noche, al menos durante un mes, podemos estar hablando de insomnio. La alimentación juega un papel muy importante en este trastorno, ya que puede ayudar a conseguir el equilibrio en casos leves o servir de apoyo a los tratamientos en casos más severos. Aquí os dejamos algunos ejemplos:
• Alimentos recomendados: nueces, almendras, cerezas, lácteos, cebada, arroz integral, patata, vegetales de hojas verdes, legumbres, naranja, berberechos y similares, germen de trigo, pescado azul y carne magra.
• Alimentos no recomendados: cafeína, alcohol, carnes ahumadas, chile o alimentos picantes y té de ginseng.
Por último, es recomendable no irnos a la cama con hambre ni con el estómago demasiado lleno; no ingerir bebidas estimulantes por lo menos las dos o tres horas previas a acostarnos; tomarnos infusiones relajantes como de valeriana, manzanilla, tila, etc. o un vaso de leche tibia; y disminuir el consumo de alimentos ricos en sal, grasas saturadas y azúcares.
Nadie se extraña hoy en día cuando comentamos que hemos dormido mal. El ritmo de vida, el estrés, algunos fármacos, el consumo de estimulantes, etc. Muchísimos factores pueden influir en uno de los momentos más importantes del día: el sueño. Si apreciamos dificultades para conciliarlo y/o mantenerlo a lo largo de toda la noche, al menos durante un mes, podemos estar hablando de insomnio. La alimentación juega un papel muy importante en este trastorno, ya que puede ayudar a conseguir el equilibrio en casos leves o servir de apoyo a los tratamientos en casos más severos. Aquí os dejamos algunos ejemplos:
• Alimentos recomendados: nueces, almendras, cerezas, lácteos, cebada, arroz integral, patata, vegetales de hojas verdes, legumbres, naranja, berberechos y similares, germen de trigo, pescado azul y carne magra.
• Alimentos no recomendados: cafeína, alcohol, carnes ahumadas, chile o alimentos picantes y té de ginseng.
Por último, es recomendable no irnos a la cama con hambre ni con el estómago demasiado lleno; no ingerir bebidas estimulantes por lo menos las dos o tres horas previas a acostarnos; tomarnos infusiones relajantes como de valeriana, manzanilla, tila, etc. o un vaso de leche tibia; y disminuir el consumo de alimentos ricos en sal, grasas saturadas y azúcares.
dpto Nutrición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario